En mi experiencia, dos de los términos que más cuesta entender son el de refuerzo y castigo. Son dos conceptos importantísimos, dos pilares fundamentales en el condicionamiento operante (una de las teorías más importantes en la historia de la psicología) y siguen teniendo vigencia a día de hoy.
El condicionamiento operante nos dice que nuestras
conductas se ven modificadas por los estímulos que las siguen, pudiendo
aumentar su probabilidad de emisión o disminuir. La confusión se produce porque
pensamos que “refuerzo” consiste en dar algo bueno para aumentar una conducta,
y castigo en dar un estímulo negativo, pero no es así.
Hay una manera sencilla de explicarlo, refiriéndose a
lo que queremos conseguir:
· Si queremos aumentar la probabilidad de
una conducta, hablamos de refuerzo.
· Si queremos disminuir la probabilidad de
una conducta, hablamos de castigo
A su vez, si lo que se hace tras la conducta es emitir
un estímulo hablamos de positivo, y si lo retiramos, hablamos
de negativo. Así que sumando las dos cosas, quedarían estas cuatro
respuestas posibles ante una conducta:
· Refuerzo
positivo: Emitir un estímulo para aumentar la
probabilidad de una conducta. Es el refuerzo que se conoce en la cultura
general: comprarle chucherías a un niño si se porta bien, alabar a un empleado
tras hacer su trabajo a tiempo…
· Refuerzo negativo: Retirar un estímulo aversivo para aumentar la
probabilidad de una conducta. Quitar un castigo a un hijo tras estudiar es un
ejemplo clásico con niños.
· Castigo
positivo: Emitir un estímulo para disminuir la
probabilidad de una conducta. Una sanción para el empleado que llega tarde, un
golpecito en la pata a un gato que está arañando…
· Castigo
negativo: Retirar un estímulo para disminuir la
probabilidad de una conducta. Se ve mucho en padres que dejan de hacer caso al
niño cuando se pone a gritar, retirarle los juguetes a un niño que le está
pegando a su hermano…
https://psicosaludtenerife.com/2014/02/06/refuerzo-y-castigo/
EJERCICIOS:
1. Juan tiene la obligación de limpiar los cuartos de aseo todos los
miércoles. Cuando trae las notas a casa, y son buenas, sus padres le quitan esa
obligación durante un mes.
2. El hermano de Juan, Alejandro, ha tenido peores resultados: ha suspendido
todas las asignaturas. Sus padres deciden quitarle el móvil.
3. La madre de Juan puede hacer horas extras en el trabajo. El jefe le dice
que las pagarán a 50€ cada hora.
4. Sin embargo, el padre no ha tenido tanta suerte. Al volver del trabajo le
han puesto una multa por exceso de velocidad.
5. Juan ha seguido estudiando. Sus padres no pueden premiar con dinero su
esfuerzo porque han de hacer frente a la hipoteca, pero le hacen notar su
orgullo con palabras amables con las que él sabe que están contentos.
6. Alejandro está celoso y deja de estudiar a propósito. Los padres, además,
del móvil, le retiran los videojuegos y se muestran enfadados con él.
7. No obstante, Alejandro tiene otros intereses, le gusta escribir poesía. Su
sueño sería ganar el Adonais.
8. Si lo ganase, tal vez sus padres le retirasen el castigo.
9. El padre, por causa de los atascos de Madrid, ha vuelto a llegar tarde al
trabajo. Su jefe le ha amenazado de despido y le va a descontar 100€ de sueldo
el próximo mes.
10.La madre ha decidido, ya que la conducta de Alejando no cambia, alterar la
estrategia. A partir de ahora le dará 10€ por cada examen en el que saque más
de un 5 y 2€ más por cada punto extra. A ver si así se consigue que mejore.
11.Juan se ha enterado y pide lo mismo. Sus padres dicen que ni hablar, que él
es un buen estudiante y que, si deja de portarse como esperan de él, le
obligarán a limpiar los cuartos de aseo cada día.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Se ruega educación en los comentarios. No se publicarán los que incumplan los mínimos. El moderador se reserva el derecho de corregir la ortografía deficiente.