domingo, 14 de junio de 2020

Diario de un profesor peliculero (8): de las películas de un país cuya historia es la más triste "porque siempre acaba mal"

Duelo a garrotazos - Francisco de Goya - Historia Arte (HA!)Cuando Europa, el mundo, entró en guerra en 1939, por aquí acabábamos de terminar la nuestra, una de ellas. Porque ya es curioso que se llame Guerra Civil Española (GCE), como si no hubiera habido más; de hecho, nos hemos pasado la historia liquidándonos unos a otros. Aunque esto era una serie de cine y filosofía, creo que hay que nombrar al que mejor entendió eso que hemos hecho excelentemente los españoles a lo largo de nuestra historia: maltratarnos los unos a los otros en una tierra que compartimos. Naturalmente, fue Goya, ese ilustrado genial. Lo hizo en su cuadro “Duelo a garrotazos”.

La GCE, como todo el mundo sabe, terminó con la victoria de Franco y la instauración de una dictadura hasta que el general murió en 1975. Después llegó, poco a poco y no sin grandes dificultades (inflación, paro, terrorismos fascistas e independentistas, golpes de estado…). El cine también cambió, se eliminó formalmente la censura y se comenzaron a filmar películas sobre la GCE desde otras perspectivas. Dicen algunos que el cine español está obsesionado con la GCE. No creo, no tanto. Si preguntamos a cualquier joven, ha visto más películas de la Segunda Guerra Mundial que de la GCE.

En tiempos de Franco se rodaron unas cuantas, ensalzando lo que se llamó el Glorioso Alzamiento Nacional o recordando gestas históricas heroicas. Para los curiosos, la película Raza (José Luis Sáez de Heredia, 1941) estaba basada en una novela homónima firmada por Jaime de Andrade, que era en realidad un pseudónimo bajo el que se escondía el nombre de Francisco Franco.

Las que se rodaron después, ya en la Transición, fueron muy distintas y también de muy diversa calidad. Permitidme que haga una pequeña digresión por alguna de ellas.

Foro de Cultura de Defensa: La VAQUILLA
Me gusta mucho La vaquilla (Luis García Berlanga, 1985), en su tiempo la más cara del cine español. Se trata de una comedia, pero de una comedia especial, como era previsible con Luis García Berlanga al frente del proyecto. Tiene algunas escenas delirantes y hubo cierto revuelo en su estreno por hacer del drama nacional por antonomasia una comedia. Pensad que en 1985 habían pasado 46 años desde el final de la Guerra, no tantos. Desde entonces hasta hoy ya han pasado otros 35 y para algunos parece que fue ayer. Berlanga filma el esperpento y creo que es antológica esa última escena en la que la vaquilla se queda muerta en tierra de nadie mientras los bandos siguen su habitual letanía de tiros e insultos… muriéndose de hambre. Qué terrible metáfora rodada en formato de comedia. Insisto: molestó a muchos.

Diez años después, Ken Loach estrenó Tierra y libertad. Es curioso que una de las películas más conocidas sobre la GCE esté rodada por un británico, porque británicos son también los grandes hispanistas: Gerald Brenan, Hugh Thomas,  Ian Gibson, Paul Preston, Raymond Carr… Esta película se centra especialmente en dar una vuelta de tuerca a la costumbre tan española de liquidarnos entre nosotros, incluso entre los del mismo bando, como muestra el director en la película con el incidente entre distintas facciones de la izquierda en Barcelona en mayo del 37, con más de 200 muertos (secuencia al final).  La he visto de nuevo hace muy poco: no es de mis favoritas, está rodada con cierto descuido (se ven los micrófonos tres veces) y los actores son desiguales, así como la película. Hay que prestar especial atención a las discusiones entre el PCE y el POUM, esto es el eje de la película, una visión del enconamiento con que se trataron los marxistas estalinistas y los marxistas antiestalinistas.  Esto nos llevaría a un repaso de la filosofía política de Marx y la diferencia entre ese socialismo teórico y el socialismo real que tuvo lugar en la primera mitad del siglo XX en muchos lugares del mundo. La película está basada, por cierto, en un libro de George Orwell, el de 1984, que se titula Homenaje a Cataluña.

Ay, Carmela (Carlos Saura) fue la sorpresa de 1990. Lo fue por su éxito de público y crítica. Pero también por la más que notable interpretación de Andrés Pajares, encasillado hasta entonces en papeles intrascendentes en películas de destape junto a Fernando Esteso. Carmen Maura, su pareja en  la ficción, le da la réplica maravillosamente. Cuenta la historia de dos cómicos de medio pelo, que sólo quieren ganarse unas pesetas y a los que importa poco la ideología, lo que quieren es buscarse los garbanzos. No obstante, algunas escenas, como la que tiene lugar en el teatro repleto de prisioneros que van a fusilar figura entre lo más sobresaliente. Es, por lo tanto, una comedia amarga, muy amarga. Su mensaje final lo aproxima a La vaquilla: ¿qué importan las ideologías si el fin inmediato de las personas humildes es buscar el sustento mínimo diario?

Mientras estoy escribiendo esto, me he acordado de la Guerra de los Balcanes, a comienzos de los años noventa. Un profesor universitario (creo recordar que croata casado con una serbia, tal vez al revés) decía amargamente que croatas y serbios son la misma mierda aplastada por el carro de la historia. Con perdón por la expresión -eran sus palabras-, es lo mismo que nos ha ocurrido aquí.

Soldados de Salamina (2003) - FilmaffinityJaime Gil de Biedma escribió un terrible poema que se ha titulado “Triste historia” o “Apología y petición”. Tres de sus versos dicen esto: “De todas las historias de la Historia / la más triste sin duda es la de España, / porque siempre acaba mal”. Esperemos que se equivoque, el fatalismo tranquiliza a muchos, pero no mejora nada.

Hay otra película relativamente reciente, que proviene de una novela de éxito notable, Soldados de Salamina (David Trueba, 2003). Creo que, en esta ocasión, es muy inferior al libro, pero tiene algunas secuencias sobrecogedoras. Cuentan Javier Cercas (autor de la novela) y David Trueba (director de la película) la búsqueda de un soldado republicano que encañonó a Rafael Sánchez Mazas, miembro fundador de la Falange, carnet número 4 de ese partido. No obstante, el verdadero protagonista no es Sánchez Mazas, sino el soldado que pudo matarlo y no lo hizo. Vemos unos minutos antes una secuencia (enlace al final) en la que en medio toma su fusil como si fuera una mujer en las fiestas de su pueblo y se arranca a cantar a capela Suspiros de España (enlace más abajo). Nuevamente vuelvo a lo de antes: un modesto campesino es arrancado de su familia y de su tierra, deja sin sustento a los suyos y se le da un fusil para que mate a quienes no le han hecho nada. Lo que en tiempos de paz sería un crimen horrible penado muy fuertemente, en tiempos de guerra se llama heroísmo y justicia. No obstante, él no se deja llevar por la corriente dominante, por lo que Nietzsche llamaría la moral del rebaño: hace lo que debe hacer cuando no hace lo que le dicen que debe hacer. Otro kantiano, hay muchos en las películas.

Lo que me molesta un poco de las películas sobre la Guerra Civil es, a falta de mejor caracterización, la escasa fuerza que tienen muchas de ellas. Parece como si el dramatismo de una guerra fuera suficiente, pero no. En esta línea coloco unas cuantas (no todos estarán de acuerdo, claro): Libertarias (Vicente Aranda, 1996), El viaje de Carol (Imanol Uribe, 2002), La mujer del anarquista (Peter Sehr y  Marie Noëlle, 2008), Las 13 rosas (Emilio Martínez Lázaro, 2007), La mula (Michael Radford, 2013), Gernika (Koldo Serra, 2016)… Incluso la muy aplaudida Por quién doblan las campanas (Sam Wood, 1943), con unos actores estupendos a los que, en esta ocasión, parece que les importa poco la historia que están interpretando.

Entre las mejores películas que se han hecho sobre el conflicto bélico español merece un lugar destacado Las bicicletas son para el verano. No es una película que recree el frente, las explosiones o los desfiles, sino, muy al estilo del cine español, cómo viven los personajes en una situación tan difícil. Pero creo que ya he escrito mucho por hoy y dejo lo de esa maravillosa película para mañana.


Secuencia de Tierra y libertad:

Dos secuencias de Soldados de Salamina:




Procedencia de las imágenes:
https://historia-arte.com/obras/duelo-a-garrotazos-de-goya
http://forodeculturadedefensa.blogspot.com/2013/05/la-vaquilla.html
https://www.filmaffinity.com/es/film157360.html

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Se ruega educación en los comentarios. No se publicarán los que incumplan los mínimos. El moderador se reserva el derecho de corregir la ortografía deficiente.